Queremos ir al gimnasio tres veces a la semana, aprender un idioma nuevo, dedicar más tiempo a los hijos, viajar más, leer varios libros al mes y escribir todos los días.
Queremos hacer muchas cosas.
El problema es que no tenemos tiempo porque llevamos una vida ajetreada y estamos siempre ocupados.
¿Te suena de algo esta historia?
Este post es una guía para que puedas encontrar ese tiempo que te falta, para que aprendas la diferencia entre no tener tiempo y no priorizar tu tiempo, y para que puedas cumplir tu objetivo de escribir y leer a diario sin sacrificar las cosas que más te gusta hacer.
Índice
- 1 ¿Qué significa no tener tiempo?
- 2 Qué queremos decir en verdad cuando no tenemos tiempo
- 3 Nosotros somos los que decidimos qué hacer con el tiempo
- 4 Consejos para priorizar nuestro día para escribir
- 4.1 Eres el responsable de tu tiempo
- 4.2 Estar ocupado no significa ser productivo
- 4.3 Escribe cuáles son tus prioridades
- 4.4 Sé realista con los objetivos que te propones
- 4.5 No procrastines con tus objetivos y tareas diarias
- 4.6 Trata la escritura como un lujo
- 4.7 Utiliza un calendario
- 4.8 Aprende a planificar
- 4.9 ¿Qué haces en estos momentos para alcanzar tus objetivos?
- 4.10 Selecciona las actividades que son más importantes para alcanzar tus objetivos
- 4.11 No necesitas dormir menos para comenzar a escribir
- 4.12 Te gusta ver tu serie preferida
- 5 Te propongo hacer un ejercicio
¿Qué significa no tener tiempo?
No tener tiempo significa ocupar el día en tareas que hemos elegido hacer, a cambio de sacrificar la posibilidad de realizar otras tareas durante ese tiempo.
En muchos casos, la mayor parte de las 24 horas de un día se van en:
- Trabajar (8-9 horas)
- Dormir (8 horas)
- Comer (2-3 horas)
- Transporte (1-2 horas)
Una vez que terminamos con las tareas del día necesarias para la subsistencia, nos suelen quedar entre dos y cinco horas diarias.
Es en estas horas cuando realizamos las tareas que más nos gustan: descansar, quedar con amigos, visitar a familiares, practicar yoga, cuidar de nuestros hijos y mascotas, escribir, leer, etc.
El problema, mucha veces, es que rara vez sacamos provecho de estas horas, y terminamos posponiendo nuestras sesiones de escritura para un futuro que nunca llega.
Y sin embargo, todo el mundo conocemos a una persona que le da tiempo a hacer todo eso y mucho más. Porque esa persona consigue sacar tiempo para todo: escribir, correr maratones, hacer varias escapadas de fin de semana, etc.
¡Y todo ello sin descuidar su trabajo, alimentación y responsabilidades variadas!
¿Qué hacemos nosotros con nuestro tiempo para que no podamos ser como esa persona? ¿Cómo podemos encontrar tiempo para escribir a diario?
Qué queremos decir en verdad cuando no tenemos tiempo
Lo que queremos decir es que no hemos organizado nuestro tiempo libre y que esa falta de organización nos impide realizar las cosas que de verdad nos importan.
Porque cuando no nos organizamos utilizamos nuestro tiempo libre en los caprichos momentáneos o las ideas que creemos que son más convenientes para utilizar nuestro tiempo en ese momento en particular.
De repente, nos acordamos de que tenemos que pagar una factura del banco, acercarnos a correos a mandar una carta o volver una vez más al supermercado porque nos falta un condimento para hacer la cena.
Y esto es especialmente peligroso cuando la falta de organización se combina con la excusa perfecta y más utilizada por y para nosotros mismos: estar cansado.
Muchas veces llegamos tan cansados a casa que nos sentamos en frente de la televisión, Facebook o cualquier red social y se nos esfuman las pocas horas que tenemos de libertad antes de que nos demos cuenta.
¿Y cuál es el resultado?
Que la vida transcurre mientras nos decimos continuamente que no tenemos tiempo para realizar las cosas que de verdad nos gustaría hacer.
Nosotros somos los que decidimos qué hacer con el tiempo
Cuando vemos la televisión, miramos Facebook, salimos a dar una vuelta, quedamos con unos amigos, salimos tarde de trabajar o quedamos para ver a un familiar, estamos decidiendo que tenemos tiempo para esa actividad y le damos prioridad antes que a otras.
Y hacer esto no es malo.
Sin embargo, es importante ser consciente de qué hacemos con nuestro tiempo. Porque si tenemos tiempo para mirar Facebook y no para escribir, esto significa que damos prioridad a Facebook antes que a escribir.
Así que ahora que sabemos que gran parte del problema es la de organizarse y saber dar prioridad a lo que nos importa, ¿por dónde podemos comenzar para cumplir nuestros objetivos?
Consejos para priorizar nuestro día para escribir
Si estás en esta web es porque te interesa la escritura. Pero esto que os voy a contar sirve para organizarse y cumplir cualquier objetivo que os propongáis.
De hecho, me he inspirado bastante en dos posts (en inglés) relacionados con la gestión del tiempo para hacer deporte que recomendaría leer (BreakingMuscle, NerdFitness), y en las respuestas de Quora de cómo las personas se organizan a diario para cumplir sus objetivos (también en inglés).
Vamos con los consejos.
Eres el responsable de tu tiempo
Hemos visto que quizá no tienes más que unas horas de tiempo libre al día, pero qué haces con esas horas es tu elección.
Si quieres cumplir alguno de tus objetivos, lo primero que tienes que hacer es asumir que eres el responsable de dedicar parte de ese tiempo a cumplirlos.
Estar ocupado no significa ser productivo
Da igual a quién preguntes hoy en día: todo el mundo está ocupado.
La diferencia muchas veces reside en que, aunque todos estamos ocupados, muchos de nosotros nos ocupamos en cosas que no tienen sentido o prioridad alguna.
Estamos ocupados por estar ocupados.
De ahí la importancia de tener unos objetivos claros que cumplir y de tener unas prioridades bien asentadas.
Escribe cuáles son tus prioridades
¿Qué te gustaría hacer en tu tiempo libre? ¿Te gustaría escribir un libro? ¿Cuánto tiempo te gustaría escribir al día? ¿Qué acciones deberías hacer para conseguir ese tiempo?
Sé realista con los objetivos que te propones
Si no estás acostumbrado a escribir, es difícil que cumplas objetivos del tipo “escribir tres horas al día”.
Porque aunque organices muy bien tu día y encuentres los huecos necesarios para escribir todo ese tiempo, la falta de costumbre y el cansancio te van a pasar factura.
Mejor proponte algo más asequible para asentar tus tiempos de práctica como escribir diez o quince minutos cada mañana.
Más adelante puedes incrementar los tiempos de cada sesión.
No procrastines con tus objetivos y tareas diarias
Este punto es especialmente difícil y requiere de mucha fuerza de voluntad.
Es muy fácil proponerte ahora mismo que mañana te vas a levantar una hora antes para escribir y, sin embargo, es igual de fácil que al día siguiente cuando te tengas que levantar, decidas hacerte el remolón y pospongas tu sesión de escritura.
La solución es:
- Fíjarse objetivos pequeños.
- Comenzar poco a poco.
- Prepararte de antemano para tu sesión de escritura.
- Cumplir el mayor número de consejos que se citan en en este post.
Y es importante que cuando llegue el momento de escribir no lo pospongas bajo ningún concepto.
Si te interesa este tema, al [thrive_2step id=’499′]suscribirte al blog[/thrive_2step] recibes gratis un libro en formato PDF con consejos para crear un hábito de escritura.
Trata la escritura como un lujo
Imagínate que has reservado en tu calendario que el jueves de 18:00 a 19:00 vas a tener una clase de escritura. Esa clase es con uno de los mejores profesores de escritura del mundo.
Has pagado 500 euros.
¿Pospondrías esa hora para bajar un momento al supermercado? ¿Cancelarías la clase porque estás cansado? ¿Llegarías tarde? ¿Tendrías todo listo antes de comenzar la clase? ¿Te asegurarías de estar con la mentalidad adecuada para sacar el máximo provecho de las explicaciones?
Pues ahora cada vez que reserves una hora para escribir trata esa hora como si estuvieses reservando una de estas lujosas y exclusivas clases.
Si utilizas este método, es mucho más sencillo ver la prioridad de tus sesiones de escritura, ¿verdad?
Utiliza un calendario
Marca las horas que vas a trabajar, las que utilizas para conducir hasta el trabajo, los días que vayas a quedar con amigos, etc.
Marca todo lo que puedas.
Reserva todas las horas que quieras dedicar a la escritura por adelantado.
Si no te gustan los calendarios, creo que estaría bien que probases a utilizar el calendario al menos por unos días como ejercicio para que seas más consciente de lo que haces en tu tiempo libre.
Aprende a planificar
Tienes claro cuáles son tus objetivos de la semana: quieres escribir y leer un número de horas determinado.
Si planificas con antelación, podrás ver que si tienes dentista el martes, quizá te convenga llevar un libro para leer en la sala de espera. Si tienes un viaje en tren, puedes llevar un libro para leer o un cuaderno para escribir.
Te sorprenderás de la cantidad de franjas de tiempo que se pueden aprovechar cuando planificas y tienes claros tus objetivos. Aunque sean ratos de 10 minutos.
Todo suma.
¿Qué haces en estos momentos para alcanzar tus objetivos?
Acostúmbrate a esta pregunta. Pregúntatela cada vez que estés realizando una actividad.
Si ves que la actividad en cuestión no te ayuda a pasar más tiempo con tu familia, a pasar buenos ratos con tus amigos, a ejercitarte o a escribir, etc., quizá deberías replantearte el porqué estás haciendo esa actividad.
Selecciona las actividades que son más importantes para alcanzar tus objetivos
A escribir se aprende escribiendo y leyendo. También ayuda leer blogs sobre el tema, comentar en forums, preguntar a escritores, hablar con amigos acerca del último libro que has leído, mirar cosas sobre marketing para escritores, escribir en blogs y un largo etcétera de cosas relacionadas con la escritura.
Sin embargo, no hay ningún escritor que se haga escritor a base de leer blogs sobre escritura, comentar a sus amigos el último libro leído o saberse todas las triquiñuelas sobre marketing online para escritores.
Las actividades principales para convertirse en escritor son las de escribir y leer. El resto son actividades secundarias que sirven de apoyo, pero no sustituyen las sesiones de escritura y lectura.
No necesitas dormir menos para comenzar a escribir
Siempre parece que cuando vamos a apuntarnos a una actividad nueva, véase ir al gimnasio o comenzar a escribir un libro, parece que solo podemos hacerlas si nos levantamos una hora antes.
No hace falta.
Además, dormir menos de ocho horas no es recomendable. Es mejor encontrar el tiempo en tu calendario y asignar prioridades.
Te gusta ver tu serie preferida
A mi también me gusta. Y siempre se puede sacar tiempo para la mayoría de actividades que quieres hacer. Lo único que te tienes que plantear es cómo sacar ese tiempo.
Por ejemplo, yo odio ver la televisión por la cantidad de anuncios que emiten. Y me da igual pagar Netflix y HBO porque me aseguro de que cuando quiero ver algo no dependo de a qué hora televisen la serie que quiero ver y que después esa serie dure el doble de tiempo por la cantidad de anuncios.
Esto es algo que recomienda Graeme Turner en su post de “Why your excuse about not having time is just wrong”, porque él también quiere ver series.
Prefiero gastarme 15-30 euros al mes, poder organizarme mejor y perder menos tiempo. Yo lo veo como pagar por tener más tiempo. Pero podrías hacer lo mismo de forma gratuita si sacas las películas de una biblioteca, por ejemplo.
Y si lo quieres llevar al extremo, puedes aprovechar aún más el día si te pones la serie con los subtítulos del idioma que estudias.
También, si tienes cualquier máquina de ejercitarte como una bicicleta estática, puedes aprovechar y ejercitarte a la vez que ves tu serie favorita, como también menciona Graeme Turner en el post citado.
Si quieres, siempre hay una forma de encontrar tiempo para escribir.
Te propongo hacer un ejercicio
De todo lo mencionado anteriormente, el primer paso es ser más consciente en el empleo de tu tiempo. Por ello te propongo que lleves la cuenta de qué haces en cada momento durante los próximos tres días.
Para hacer esto solo necesitas una libreta pequeña y un lápiz. Pero también puedes utilizar una app de notas o una más específica de “tracking” de tiempo como Life Cycle.
Cada vez que realices una actividad, apunta qué es lo que vas a hacer. Cuando termines de hacer la actividad, escribe cuánto tiempo has dedicado.
Un ejemplo sería algo como:
- Poner lavadora (10 minutos)
- Recoger cocina (20 minutos)
- Contestar mensajes de Whattsup y mirar Facebook (15 minutos)
- Tender ropa (10 minutos)
- Quedar a tomar una cerveza con amigos (2 horas).
Al final de los tres días, puedes sumar todo el tiempo que has dedicado a cada actividad o, en el caso de que tengas una app, mirar las estadísticas.
No te asustes cuando veas cosas de este estilo:
- 2 horas de contestar mensajes y mirar Facebook a lo largo del día.
- 1 hora de ver series al día.
- 2 horas y media en cenar.
- 1 hora en bajar a hacer recados al supermercado y la ferretería.
Lo más importante de este ejercicio es ser sincero. Más que nada porque de engañar a alguien, te estarías engañando a ti mismo.
Una vez que seas más consciente y veas sobre papel dónde se te va el tiempo, te resultará mucho más sencillo ponerte objetivos del tipo:
- “Voy a dedicar media hora menos al día a mirar Facebook y en su lugar voy a substituirlo por leer libros”
- “Voy a planificar mis viajes al supermercado para hacerlo directamente cuando vuelva del trabajo y ahorrarme un paseo de 20 minutos”
Además, te sorprenderá la cantidad de tiempo que dedicas a cosas que no tenías planeadas para el día; cosas que además no tienen nada que ver con tus objetivos, que no son prioritarias y que, sin embargo, en el momento pensaste que sí lo eran.
Espero que después de leer este post, no utilices más la excusa de “no tener tiempo” para no escribir. Ahora puedes decir que si no escribes es porque escribir no está entre tus prioridades diarias o semanales.
¿Darías algún consejo para aprovechar mejor el día? ¿Has conseguido encontrar algún hueco para escribir mañana? ¿Qué objetivos te has fijado?
Si te ha gustado el post y quieres ver contenidos similares en la web, deja un comentario o dale al botón de “me gusta” en la página de Facebook. 🙂
Me ayudas si me dices qué te ha parecido el post. Puedes puntuarlo con las estrellas amarillas:
[ratings]
Muy útiles tus consejos, muchas gracias por la información. La pondré en práctica. Sentía que desperdiciaba el tiempo y ahora veo el porqué de las cosas.
Hola Bianca,
Muchas gracias por pasarte a comentar en el blog. Me alegra mucho que te hayan resultado útiles los consejos. 🙂
Buenos consejos para dar prioridad con nuestro tiempo. Me gustaría que hablases en alguna ocasión de la disciplina, es uno de mis mayores problemas a la hora de escribir.
Tengo rachas en las que apenas escribo.
Hola Jorge,
Interesante. Me lo apunto e intentaré escribir en un futuro acerca de la disciplina. Lo mejor que puedes hacer es crear un hábito de escritura diario. Pero es muy fácil decirlo y no tan fácil implementarlo. Publicaré una entrada sobre ello. 🙂
¡Un saludo!
Acabo de descubrir tu blog y parece que me conocieras! Tremendamente logicos y utiles tus consejos, hoy mismo comienzo por ponerlos en practica y os comento que tal! Muchas gracias de antemano! 😉
Hola Chris,
¡Me alegra mucho que te hayas pasado por aquí! Ya me dirás que te parecen los consejos. 🙂